# Noticias Mar2025
Aranceles en Energía. Esto es lo que podría acontecer

Desde el inicio de 2025, el sector energético en México ha estado en continua presión e incertidumbre derivado de la coyuntura tanto nacional como regional. En lo regional, se encuentra la presión por parte de la administración de Donald Trump por poner aranceles a todas las exportaciones mexicanas, incluidas las exportaciones en materiales energéticos.

Tras el anuncio de Donald Trump de finalmente poner aranceles a todas las exportaciones que vinieran desde Canadá y México el 4 de marzo, el sector energético mexicano comenzó a materializar sus miedos. Aunque se escuche descabellado, México si exporta materiales clasificados como energéticos hacia Estados Unidos, aunque su cantidad y valor no alcance a competir con otras exportaciones.

Según la Secretaría de Economía, las exportaciones de electricidad de México hacia Estados Unidos representan menos del 1% de las ventas en la relación comercial, y en 2023, estas ventas alcanzaron los 140 millones de dólares, mientras que otro material relevante para la generación de energía, el gas de petróleo, sólo alcanzó 18 millones de dólares en venta, muy poco comparado con otras exportaciones, como las máquinas para procesamiento de datos, que en el 2023 alcanzaron ventas por 27 mil 79 millones de dólares y estas representaban el 6.23% del comercio total.

Por otro lado, la aplicación de aranceles diferenciados ha demostrado la disparidad en el tratamiento de las exportaciones energéticas de Canadá y México. Mientras que el gobierno estadounidense decidió imponer un arancel del 10% a los productos energéticos canadienses, en 2021 estas exportaciones alcanzaron un valor de 112 mil millones de dólares, reflejando su peso estratégico para la economía estadounidense.

A día de hoy, la implementación de los aranceles ha sido pospuesta por segunda vez, estableciendo una nueva fecha límite en abril de 2025. Se prevé que, de aplicarse, estos gravámenes se limiten a productos fuera del marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), cuya incidencia en el comercio bilateral es muy poca.

A pesar del contexto de incertidumbre, el tipo de cambio ha mostrado resiliencia, lo que sugiere una percepción positiva respecto a la estabilidad macroeconómica del país. Asimismo, existe una convergencia de intereses entre el sector empresarial y el gobierno mexicano para mitigar el impacto de estas medidas y reforzar la competitividad del país.

Históricamente, México ha demostrado capacidad de adaptación frente a políticas comerciales adversas, como ocurrió durante la primera administración de Trump, cuando diversas exportaciones mexicanas fueron objeto de aranceles sin que ello derivara en un colapso de la relación comercial.

En este sentido, el desafío actual radica en fortalecer la cooperación público-privada y diversificar mercados estratégicos para reducir la vulnerabilidad ante decisiones unilaterales que puedan afectar la estabilidad del sector energético y la economía en su conjunto.

En Enicon, como empresa mayormente mexicana, confiamos en que estas discusiones no escalen a mayor término y que se pueda encontrar una solución donde se fortalezca la relación bilateral con Estados Unidos, a la vez que también la relación trilateral, con el fin de que esto conlleve una aún mayor certidumbre sobre la economía mexicana.